¿Alguna vez te has preguntado cuáles son los mejores aceites esenciales para bebés y cómo usarlos? Si has sido mamá reciente, seguramente esta duda te haya rondado por la cabeza en más de una ocasión.
Y es que los aceites esenciales y vegetales básicos resultan beneficiosos para cuidar la delicada piel de los peques y, además, para protegerla de las amenazas externas. Los mismos, incluso podrían ser un remedio ideal para garantizar tu propio bienestar gracias a sus propiedades relajantes y estéticas.
Así que si te interesa este tema, ¡sigue leyendo y no pierdas detalle!
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¿Qué son los Aceites Esenciales y Para Qué Sirven?
El uso de los aceites esenciales se remonta a la antigüedad, cuando en especial las mujeres deseaban beneficiarse del agradable aroma de algunas hierbas y plantas para realzar su belleza.
La lavanda, el árbol del té o la manzanilla son solo ejemplos de algunas sustancias que se emplean para la composición de estos productos.
Y al igual que Cleopatra se sirvió del agua de rosas para conquistar a Marco Antonio, hoy en día estos compuestos químicos a base de productos naturales se destinan a distintos usos.
Así, no solo triunfan en el ámbito de la estética y la cosmética, sino que se han convertido en verdaderos remedios naturales para combatir toda clase de afecciones cutáneas.
El poder de los aceites esenciales para procurar un buen cuidado es innegable. Mejorar la calidad de vida de tu bebé y la tuya es posible si te armas de los recursos necesarios para ello.
Aprender qué aceites esenciales utilizar en cada caso y cómo hacerlo puede ser clave para vivir tu maternidad desde una perspectiva más relajada.
Precauciones a Tener en Cuenta
Antes de nada, debes saber que hay que tomar una serie de precauciones antes de usar los aceites esenciales en bebés para que sean totalmente seguros. De esa forma, evitarás riesgos y tu bebé podrá sacar partido de todos los beneficios.
Como los mismos suelen ser muy concentrados, has de informarte sobre la dosis correcta que usar en cada caso y qué ventajas pueden aportarte en el día a día.
Además, deberás cerciorarte de la alta calidad del aceite esencial a aplicar, así como la posibilidad de utilización en bebés según su tiempo de vida.
Evidentemente, estos han de emplearse en combinación con otros productos para un uso responsable y la total protección de la piel de tu pequeño.
Los aceites portadores más adecuados para diluir los aceites esenciales para bebés son el aceite de almendra dulce y el aceite de jojoba. Tan solo tendrás que verter unas pocas gotas de los aceites esenciales sobre una gran cantidad de los mencionados para obtener la combinación perfecta.
En general, los aceites esenciales son aptos para los peques a partir de los 3 meses de edad, pero obviamente deberás seleccionar aquellos que sean idóneos para su sensible piel. Por eso, tendrás que conocer al 100% sus ingredientes y sus propiedades específicas.
Igualmente, es importante aplicarlos solo en zonas concretas como la barriguita, el pecho o la espalda. Además, se debe evitar a toda costa que estos entren en contacto con los ojos o la boca.
Cómo Aplicar los Aceites Esenciales para Bebes
Existen tres formas principales de usar los aceites esenciales en bebés para que su uso sea eficaz. ¡Presta mucha atención!
Ligero Masaje
Se trata de la forma de aplicación más común. Recuerda que tendrás que diluir los aceites esenciales en aceites vegetales para evitar casos de irritación cutánea o sensibilidad.
Este masaje ha de realizarse de forma suave y delicada en partes del cuerpo como los brazos, el pecho, la espalda, los pies o el vientre.
Generalmente, la zona de masaje varía en función de los resultados que se deseen conseguir.
Baños
En algunos casos, se recomienda utilizar las gotas de aceites esenciales mezcladas con el agua del baño.
Debido a la sensibilidad de la piel infantil, deberás emplear solamente aceites diluidos que garanticen un óptimo cuidado.
Difusión o Vaporización
Aunque no lo creas, es posible emplear un difusor eléctrico para dispersar los aceites esenciales en el aire para que tu hijo se sienta mejor.
Respirando en esa atmósfera, tu bebé podrá calmar los signos de constipados, congestiones y cualquier clase de problemas respiratorios relacionados.
Beneficios de los Aceites Esenciales en Bebés
A continuación, te contamos algunas de las cualidades básicas de los aceites más apropiados para el uso infantil. ¡Vamos allá!
Aceite Esencial de Manzanilla
El aceite de manzanilla es capaz de combatir diferentes condiciones. Sin embargo, su utilización en bebés se hace especialmente necesaria en algunos casos concretos.
Cuando estos se encuentran en fase de cólicos por la dificultad para expulsar los gases, entre otras causas, este aceite esencial puede convertirse en tu mayor aliado.
A través de un ligero masaje en la zona del ombligo, podrías ayudarles a regular su tránsito intestinal.
Aceite de Lavanda
La lavanda es un producto que favorece el sueño. Así que el uso del aceite esencial de lavanda para hacer dormir a los bebés es el más adecuado.
Lo cierto es que las gotas de esta esencia pueden aplicarse tanto al agua del baño como a las sábanas del peque a la hora de dormir. Su agradable olor y sus propiedades relajantes le inducirán a conciliar un sueño reparador.
Otros Aceites Esenciales
Aceites esenciales como el neroli o la mandarina pueden ayudar a que el bebé se calme si está muy nervioso. Y es que estos dos aceites tienen unas propiedades calmantes muy interesantes.
Por otro lado, aceite de ravintsara también es ideal para tratar afecciones respiratorias.
Conclusiones Finales
El uso de los aceites esenciales en bebés ha demostrado ser altamente efectivo como remedio natural para tratar algunas afecciones. Sin embargo, no utilizarlos de la forma adecuada puede entrañar peligros para la salud de tu bebé.
Por ello, se recomienda un uso responsable y seguro de los mismos. Siguiendo las indicaciones recomendadas y valiéndote de toda la información disponible, podrás beneficiarte de unos resultados increíbles en poco tiempo. ¿A qué estás esperando?
Consulta con tu pediatra antes de usar cualquier aceite esencial en bebés y niños.
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